Despertar el Mesias que llevamos dentro.

Hace poco releyendo la novela de Richard Bach "Ilusiones" encontré las respuestas a algunas de mis dudas sobre como despertar a ese ser espiritual que llevamos dentro. Una de las cosas que aprendí es que no se debe forzar, siempre hay algo o alguien que enciende la chispa , hay un adagio chino que reza"cuando el alumno está preparado aparece el maestro", a veces es un hecho fortuito, una lectura, conocer a una persona, sufrir algun percance lo nos puede llevar a encender esa chispa de la espiritualidad. Practicar la meditación, buscar el silencio por lo menos dos veces al día, en la mañana y en la tarde nos permite hurgar en nuestro interior y soltar los miedos, los rencores , las tensiones y todo lo que nos inquieta y no nos permite la paz necesaria que nos ayudará en ese despertar.

Tratar de hacer las cosas de acuerdo a tu conciencia y no porque es lo correcto "Tu conciencia es la medida de la honradez de tu egoísmo, escúchala atentamente." Muchos de los actos mas atroces del mundo se han hecho en nombre de la ley.

Y así el libro nos va llevando a reconocer todos esos pasos para despertar al mesias que llevamos dentro, a darnos cuenta que " enseñamos lo que mas necesitamos aprender" y que :"debemos vivir de tal manera que nunca te averguences si se divulga por el mundo lo que dices y haces, aunque lo que se divulgue no sea cierto."

También nos dice Richard Bach en "Ilusiones" que existe una ley cósmica donde" los semejantes se atraen. Limítate a despegar tu propia personalidad, serena y transparente y luminosa. Cuando irradiamos lo que somos, preguntándonos a cada instante si lo que hacemos es lo deseamos hacer y haciendolo sólo cuando la respuesta es afirmativa, nuestra actitud rechaza automáticamente a quienes nada tienen que aprender de lo que somos y atrae a quienes sí tienen algo que aprender, que son los los mismos de quienes nosotros a la vez aprendemos".

Es interesante descubrir que "El vínculo que une a tu auténtica familia no es de sangre, sino de respeto y de goce mutuo. Es raro que los miembros de una familia se críen bajo un mismo techo", quizás por eso sentimos tanta afinidad con personas ajenas a nuestra familia consanguínea, como dice mi amigo Alex: somos familias espirituales.

Así el escritor nos va llevando a darnos cuenta que llevamos un mesias dormido en nuestro interior y el día que lo descubramos seremos capaces de hacer milagros y derrumbar todas esas limitaciones que creamos tener.

En tu alma en tu espiritu, en tu mente, en tu pensamiento en donde quieras llamarlo existe esa puerta de entrada al mundo de los milagros, solo tienes que despertar al mesias que hay en ti.